Waterfall método

El método waterfall utiliza un enfoque lineal para el desarrollo de software. El proyecto se divide en una secuencia de tareas, y la agrupación de nivel más alto se denomina fases. 
 
Esta metodología es un proceso formal en el que en cada fase comprende una lista de tareas detalladas con documentación adjunta y criterios de salida. Así, el progreso fluye de manera constante hacia la conclusión (como una cascada, waterfall) a través de las fases: análisis, diseño, desarrollo, pruebas... 
 
El objetivo del método Waterfall es eliminar la mayoría de los riesgos del proyecto a través de la investigación detallada. Algunas de las ventajas de la metodología waterfall son:
  • Es fácil de administrar ya que cada fase tiene entregables específicos y un proceso de revisión.
     
  • Mejora la utilización de los recursos porque las tareas se pueden dividir para trabajar en paralelo o agruparse para aprovechar las habilidades de los recursos.
     
  • Las fases no se superponen.
     
  • Los requisitos se completan al principio del proyecto, lo que permite al equipo definir el alcance completo del proyecto, crear un cronograma completo y diseñar la aplicación general.
     
  • El estado del proyecto se mide más fácilmente en base a un cronograma.