Rotación de personal
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Analizar los motivos de la rotación: es importante recopilar los datos, entendiendo que no hay una misma causa para todas las bajas.
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Contratar a las personas adecuadas: hacer una selección eficaz pasa por realizar pruebas basadas en la evaluación de las competencias y comportamientos que necesitarán poner en práctica.
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Inspirar transparencia: la transparencia es crucial para que cualquier relación prospere a largo plazo, también para que los colaboradores se queden en la empresa y para tener una organización saludable.
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Beneficios sociales competitivos para los empleados: tras pagar a los empleados el salario justo por su trabajo, es importante ofrecer beneficios atractivos, competitivos y acordes con el desarrollo de un empleado.
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Ofrecer flexibilidad laboral: un horario flexible tendrá efectos positivos en la retención, tanto para los managers como para el resto de la organización. Los horarios de trabajo flexibles o el teletrabajo permiten a los empleados ajustar su tiempo y su lugar de trabajo a sus necesidad y, por lo tanto, permiten la vida laboral y la personal.
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Dar reconocimiento: mostrar aprecio por las contribuciones de un empleado es una excelente forma de mantenerlo comprometido. Luis Castellanos, pionero en la investigación del lenguaje positivo, muestra que el reconocimiento tiene un efecto contagio y ayuda a ser mucho más productivos.
- Fomentar la gratitud: promover las habilidades sociales en los empleados ayuda a que conecten entre sí. Sus relaciones serán más sanas, ellos se sentirán más felices y estarán más atentos a los buenos comportamientos de sus colegas.
En Recursos Humanos reducir la tasa de rotación es clave. Para abordar este problema, es necesario observar las razones que la provocan y saber cómo combatirlas. En este post te ayudamos a reducir la rotación aumentando la satisfacción laboral y construyendo una cultura organizacional a la que todos querrán permanecer.
Los verdaderos motivos de la rotación de los empleados son como esas preguntas cuya respuesta no queremos oír. Tal vez porque, de hacerlo, deberíamos enfrentarnos a nuestros propios errores. Pero ¿no están para eso los errores? Podemos aprender y debemos actuar en consecuencia, si queremos trabajar en una empresa en la que a las personas realmente les guste estar.