Se trata de la capacidad de las empresas para adaptarse al nuevo modelo digital y a las nuevas tecnologías. La estrategia de digitalización es la penetración gradual de las tecnologías digitales en las esferas de una empresa. La mejor manera de innovar es a través de la digitalización, que implica que los procesos comerciales utilicen soluciones digitales para aumentar la calidad y la velocidad de su trabajo.
A medida que haya más dispositivos y herramientas disponibles, es más fácil brindar servicios y productos de calidad a los clientes. Los beneficios más importantes de este proceso de cambio son:
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Rapidez: automatizar un proceso puede lograr reducciones de tiempo de hasta un 85% respecto a los medios manuales.
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Ahorro: en lugar de desperdiciar materiales y recursos en hacer las cosas de manera artesanal.
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Reducción de errores: especialmente en aquellos procesos que requieren capacidad de cálculo o procesamiento de gran cantidad de información. O incluso en procesos sencillos pero repetitivos en los que perder la concentración sería el desenlace más probable.
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Aumento de la calidad: las herramientas especializadas aportan nuevas y potentes funcionalidades. La rigidez y poca adaptabilidad provoca estancamiento y falta de competitividad.
