Se les conoce como habilidades que sirven para manejar nuestras relaciones humanas en un entorno laboral. Aunque no aparecen como logros académicos en nuestro c.v., son muy demandadas a la hora de buscar y evaluar personal.

Algunos ejemplos, entre tantas que existen de soft skills, son: tener actitud flexible ante circunstancias cambiantes, capacidad para la empatía, resiliencia y habilidad para manejar conflictos en momentos de tensión. Cuidado al confundirlas con Hard Skills.