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16 de abril de 2017


Tengo 12 años y también crezco con Feedback

*esta foto ha sido cedida por la familia de Pedro para su publicación en exclusiva en este post.

 

Nadie como los niños para enseñarnos a ver el mundo de nuevo, desde una perspectiva totalmente limpia de creencias y prejuicios. Si algo fantástico tiene tenerlos en nuestras vidas (hijos, sobrinos, vecinos, los hijos de nuestros amigos...) es que su opinión certera sobre muchos temas de discusión de los adultos es como un soplo de aire fresco.

Del mismo modo que ya hablamos de la importancia de la evaluación del desempeño desde el punto de vista de un padre que ayuda a crecer a su hijo en el post "¿Cómo evalúas el desempeño de tus hijos?", tenemos la suerte de contar con la visión de un niño que nos cuenta cómo ellos también lo practican ( y lo necesitan) para seguir siempre aprendiendo para sorprendernos con su inteliegencia y perspicacia ;-)

Nuestro gran protagonista es Pedro (uno de los niños de la familia en el equipo de Hrider*) que un buen día se animó a contarnos cómo ve él todo esto del Feedback:

  • ¿Qué es el feedback?
    "El feedback son todas las respuestas y comentarios que me dan a algo que he hecho. Aunque yo no sea un alto ejecutivo de una gran empresa, yo recibo feedbacks en mi día a día por parte de mis profes en el cole, de mi familia, de mis amigos y de mis entrenadores de fútbol".

     
  • El feedback en el cole
    "Cuando la profe me da la opinión de un trabajo, prefiero que me las dé a solas, tanto si lo hago bien como si lo hago mal, porque cuando me dice que está mal me enfado, me bloqueo, porque he trabajado mucho y me siento mal. Cuando lo hago bien me pongo muy contento por ver que el trabajo está correcto y que el esfuerzo ha merecido la pena. También me anima a seguir haciéndolo bien para los próximos trabajos".

     
  • El feedback en el fútbol
    "Al contrario de lo que me pasa en el cole, cuando la entrenadora me dice que no estoy jugando bien, prefiero que me lo diga con los compañeros delante, porque así ven mis fallos y me ayudan a corregirlos. Cuando me dice que estoy jugando bien, también me gusta que me lo diga delante de mis compañeros, me hace ilusión".

     
  • El feedback con mis amigos
    "Cuando le tengo que decir a un amigo que está haciendo algo mal simplemente se lo digo y él lo intenta rectificar. Como hay bastante confianza, a veces podemos ser bastante brutos diciéndonos las cosas, pero nos las decimos con cariño. Por ejemplo, cuando jugamos online a un juego y por culpa de uno de nosotros perdemos la partida, nos decimos de todo, pero le damos a la siguiente partida y solo nos quedamos con lo que tenemos que mejorar para por fin ganar".


    "A veces, yo mismo pienso en lo que he hecho y cómo lo he hecho (por lo que he leído en el blog de Hrider, eso se llama autoevaluarse). Me gusta perfeccionar mis notas y mis saques de banda y nadie mejor que yo sabe cómo hago esas cosas o por qué fallo. Así que de vez en cuando me gusta pensar en cómo mejorar aunque los demás no me lo digan".

    "A mí me gusta recibir feedback. Tanto positivo como negativo (menos en el cole, que en ese caso me ofusco). Y me encanta dar feedback porque creo que así nos ayudamos a mejorar unos a otros. Como cuando le digo a alguno de mis amigos que se ha olvidado de subirse la cremallera del pantalón [risas] , aunque eso no sé si es feedback de verdad, pero es divertido y le ayudo a mejorar su imagen".

Como véis, no podíamos tener más suerte con las reflexiones de Pedro que nos enseñan cómo, del modo más natural del mundo, también nosotros podemos abrazar el feedback continuo como el mejor aliado para nuestro aprendizaje. ¡Gracias campeón!

*prometemos que contamos con el permiso de la mamá de Pedro y que en ningún momento le sobornamos con chuches para todo un año si colaboraba en nuestro Blog!